"Te veo a veces en alguno de esos sueños que se quiebran cuando la última campanada de las 10 me toca, y te extraño cuando despierto, llorando, gimiendo, de todos los días y todas las noches, a veces también, me gustaría saber tu nombre."
Quisiera sentirte en ese erotismo, tan pronto, patético; con tu cuerpo avellanado, tus vellos erizándose al calor de la luna, de las sábanas, tu manía de torcerme los rizos de mi cabello mientras me exhalas, me dan ganas de morderte los pechos, pero me gustas, así, tan liso, patético.
Entumecido me desgarras un poco la tela de mi juicio, y te llamo en murmuro con un poco de llanto sonriente, quisiera entonces rozarte el viento que se cuela por tu ombligo, tu lengua me canturrea un poco mis ganas, de todas maneras me acurruco entre tus piernas mientras tu lames mis dedos y me recitas una poesía vieja de un amor errático, y aún quiero quererte patético, pero me limito a amarte en la carne mas no en el cuerpo, mientras me vacío las letras en lo mojado de tu vientre y te aprisiono la noche en mis caderas desnudas.
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Déjame tu alma