"Nos quedamos vacíos al final de todo, desgarramos nuestros interiores para dejarlos herniados, sangrados, nuestra alma cogió camino hacía el olvido, nos miró con desprecio y se alejó, juró no volver a vernos, pues nuestra estupidez, la había destrozado."
Siempre después de cada palabra tuya un sollozo tenúe le sigue a mi piel, y mi cabeza se descontrola al no encontrarle sentido a lo que dices, sólo siente las pequeñas puntadas de tus agujas, me atraviesan, aguejerean el interior de lo más preciado que tenía, porque ahora se ha volcado a la penumbra, y me mira, despidiendose de mi ausencia, tropieza, pero continúa decidida a irse, sabe que se irá, y que tal vez, no vuelva.
Estoy harta de escucharte a hablar, ya no sé porque sigo aquí, porque yo no te amo, no se lo que hago pero no te amo, no eres mi ser por el cuál vivir, más bien, me muero a tu lado.
Si tan sólo me dejaras ser libre de tu aprisionado recuerdo, si tan sólo me dejaras ir sin reprochar, sin esperar que yo volviese, sin gritarme después a escondidas cuanto me odias, si me dejases ser feliz, entonces realmente comenzarías a amarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Déjame tu alma