"Mi fuego negro."
Mientras leía un pasaje erótico del actual libro que leo se me hinchó el vientre y el pecho, una corriente eléctrica recorrió mi piel y tu nombre resonó en mi cabeza.
¿Esto es normal? ¿Está bien?
Te deseo.
A tus manos.
A tu figura.
A todo lo que no he visto, lo que no conozco.
Te quiero, preciosa.
ResponderEliminarP.